Terapia Online y COVID-19

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 En DDIVAN se apoya con responsabilidad a DOGC de 06/19/2020 de la «RESOLUCIÓN SLT / 1429/2020, de 18 de junio, por la que se adoptan medidas básicas de protección y organizativas para prevenir el riesgo de transmisión y favorecer la contención de la infección por SARS-CoV-2 «. Con entrada en vigor el mismo 06/19/2020, para las actividades profesionales y servicios con apertura al público, cabe destacar las siguientes prevenciones:
• Obligación de adoptar medidas organizativas para dar atención preferente a personas vulnerables (según criterios sanitarios), y que no puedan usar mascarilla.
• Se debe garantizar la separación interpersonal mínima de 1,5 metros, tanto para personas trabajadoras como para personas usuarias, y un espacio mínimo individual de 2,5 m2. En caso de que no sea posible, hay que garantizar el uso de elementos de protección adecuados (mascarillas, etc.). No se pueden mantener distancias inferiores a 1 metro en espacios cerrados, excepto entre personas que mantienen una relación o contacto cercanos de forma muy habitual, o bien para desarrollar actividades profesionales o de atención a personas que requieren una distancia menor.
• Los trabajadores y usuarios deben disponer de soluciones desinfectantes hidroalcohólicas o, alternativamente, de agua y jabón.
• Hay que nombrar una persona de la organización que sea responsable del cumplimiento de las medidas de higiene y seguridad.
• Necesidad de una intensiva limpieza y desinfección de los espacios.

Por este motivo, a partir del 01/07/2020 SE SIGUE DANDO PREFERENCIA A LAS TERAPIAS EN FORMATO ONLINE.

 

La Sesión Online proporciona una serie de ventajas:

  • En la actualidad, puede evitar la sensación de agobio que podría generarse en la terapia presencial con el uso de mascarilla.
  • En la actualidad, el formato online permite que  pacientes y terapeuta puedan verse y hablar sin las interferencias (Físicas/emocionales/cognitivas) que podría provocar la mascarilla en presencial.
  • Puede ser útil a las personas que residen en el extranjero y a las personas con problemas físicos – reposo, discapacidad, enfermedad..-
  • Proporciona horarios más flexibles
  • Más flexibilidad en las respectivas agendas
  • Supone una inversión económica menor -se reduce tiempo y desplazamiento-

 

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EN ESTE CENTRO SE SIGUE CUIDANDO DE TÍ

Y OFRECIENDO UNA TERAPIA CUIDADA, CERCANA Y DE CALIDAD.

 

MEDIDAS SANITARIAS en DDIVAN

(En el caso de que la actividad sea presencial)
Debido a la situación sanitaria del COVID19,  la consulta ha sido organizada para ofrecer el máximo de seguridad sanitaria:
• Las sesiones estarán espaciadas para poder higienizar la consulta eentre-sesiones y NO tener que utilizar la sala de espera.
• Al llegar a la consulta será necesario que te laves las manos con el gel hidroalcohólico virucida que encontrarás al llegar.
• Cuando entres deberás usar la doble alfombra desinfectante. Primero pisarás la zona de desinfección del calzado y acto seguido  pasas a la zona de secado.
• Será necesario que dejes tus pertenencias (bolsa, llaves, móvil, chaqueta … en el espacio recibidor. Hasta que tú hayas salido no debe entrar nadie más en 30 minutos.
• En la consulta todo está desinfectado, sin embargo habrá productos a tu disposición por si quieres también hacerlo tú.

El espacio de la consulta ha sido reorganizado para que nos sintamos cómodos, espaciosos y seguros. Una vez sentados en la consulta, la distancia y la pantalla protectora de sobremesa pueden permitir hacer la sesión sin mascarilla. Sin embargo es aconsejable que recuerdes llevar para tu uso personal exclusivo:
• Mascarilla o pantalla facial
• Pañuelos
• Una botellita de agua
Se recomienda:
• Si has contraído la enfermedad o tienes síntomas, no reserves tu cita hasta pasados 14 días sin síntomas.
• Si tienes alguien en casa enfermo, evita venir y recuerda que existe la opción de hacer la sesión de forma online.
• Tómate la temperatura antes de la visita, si es = / + 37,2 avísame.
• Hay que venir solo -no acompañado-. En cada franja terapéutica sólo estarán terapeuta y  paciente. Si se debe hablar con algún familiar de los pacientes, la conversación será vía telemática.
• Como recomiendan las autoridades, sólo se hará uso del WC en casos estrictamente necesarios

En relación a COVID-19…

 en el caso de un adulto, cuando un evento grave afecta la colectividad, se crea una condición de elevada emotividad que involucra al
individuo y a la comunidad. El evento crítico mismo puede causar reacciones emotivas muy intensas que
pueden interferir con las capacidades de funcionar tanto durante la exposición como después, con tiempos
diferentes e individuales.
Desde el momento de la exposición hasta hoy pueden ocurrir las siguientes fases:
– Fase de shock (sensación de extrañeza, de irrealidad, de no ser uno mismo, de no sentir el propio cuerpo,
de confusión, de desorientación espacial o temporal). El shock es parte de la reacción fisiológica aguda
frente al estrés y es un mecanismo que permite mantenerse a cierta distancia del evento, necesaria para
amortiguar el impacto y tal vez enfrentar las necesidades de la primera fase.
– Fase del impacto emotivo: se pueden experimentar una vasta gama de emociones como tristeza, culpa,
rabia, miedo, confusión y ansia. Pueden también desarrollarse reacciones somáticas como trastornos
físicos (dolor de cabeza, trastornos gastrointestinales, etc.), por la dificultad a recuperar un estado de
calma.
– Fase del afrontamiento: empezamos a preguntarnos por lo que ha sucedido, a buscar explicaciones,
acudiendo a todos nuestros recursos (“¿Por qué está ocurriendo este evento?”, “¿Que puedo hacer?”, “¿Por
qué ahora?”)
A continuación las reacciones más comunes, que pueden durar algunos días y/o semanas:
– Intrusividad: imágenes recurrentes, recuerdos involuntarios e intrusivos (flashbacks).
– Evitación: es un intento en vano de evitar pensamientos o sentimientos conectados al evento.
Imposibilidad de acercarse a cosas que estén conectadas con el evento.
– Humor deprimido y/o pensamientos negativos y persistentes. Creencias y expectativas negativas sobre
uno mismo o sobre el mundo (por ejemplo, empezar a tener pensamientos como“el mundo es totalmente
peligroso”)
– Sentimiento de culpa persistente e irracional hacia uno mismo o hacia los demás por haber causado el
evento traumático o por sus consecuencias, generalmente, derivadas de haber vivido experiencias directas
de contagio o contacto.
– Sentimiento de culpa por haber sobrevivido.
– Emociones negativas persistentes conectadas al trauma (por ejemplo sentir miedo, horror, rabia, culpa,
vergüenza; durante mucho tiempo y cuando la situación parece mejorar)
– Dificultades para dormir y/o problemas en la alimentación: dificultades para quedarse dormido,
despertarse durante el sueño, pesadillas frecuentes o dormir demasiado.
– Marcada disminución del interés hacia actividades agradables.

Existen importantes diferencias individuales en la aparición, la duración y la intensidad de estas reacciones.

 

AEE Asociación EMDR España. www.emdr-es.org

EMDR Europe Association – www.emdr-europe.org